Autora: Littleevilmaknae
Pareja: EunHae
Género: Drabble
Género: Drabble
Advertencias: Según me comentaron, es malo para los diabéticos tanta azúcar xD
Descripción: DongHae siempre ha significado lo mismo para EunHyuk, nunca ha cambiado. Aunque a veces lo cree infantil e inmaduro, siempre supo que no podría vivir sin él, y que sin duda, lo amaba como KyuHyun a la play station
Nota de la autora: Hola!! Hice -o intenté- un esfuerzo para crear un fic empalagoso! El EunHae saca ese lado de mí! (?) ^_^ Espero que les guste, besos!
¿Recuerdas cuando nos conocimos?
Bueno, fue
hace mucho tiempo, pero creo que nunca olvidaré al juguetón niño de ojos
tristes que corría por la plaza dando la impresión de que su energía nunca
acabaría.
¿Y de cuando
nos hicimos mejores amigos?
Era un día soleado,
estoy seguro. También estoy seguro de que me pareciste divertido, por lo que
acepté casi de inmediato jugar cuando me lo propusiste.
¡Qué malo
eras para jugar las escondidas!
Aquella
cálida sensación, cuando nos tomamos de la mano, ¿sigues recordándola?
Fue casi
inevitable. “Tómense de la mano con el compañero de al lado y formen una ronda”
indicó nuestra maestra de jardín de infantes. Tú, DongHae, eras mi compañero de
al lado, por lo que sin pensarlo dos veces tomé tu mano.
¡Oh, el
dolor desapareció de inmediato!
Aunque tenía
una corta edad, tenía muchos problemas familiares, sobre todo en el lado
económico, ¡y yo era tan inocente! Igual
de inocente de lo que eres tú ahora.
¿Cómo es
posible que tu pequeña y cálida mano lo cambiara todo?
También creo,
que al igual que yo, eres incapaz de olvidar nuestro primer beso.
Fue
accidental. Tú, pequeña e inocente alma, jamás habrías pensado algo tan
depravado como probar los labios de otro.
Pero te
caíste arriba mío, ¡qué bobo eres! Y sin querer apoyaste tus labios sobre los
míos. ¡Mi primer beso tendría que ser con una chica! ¡Y no a los 8 años!
Qué diablos,
¡lo arruinaste todo!
Pero por
algún extraño motivo, yo no estaba realmente enojado.
¿Por qué tus
labios eran tan suaves? ¿Por qué fue tan corto? ¿Por qué te empezaste a reír
como nunca? ¿Por qué quería que se prolongara?
¿Por qué me
había gustado?
Oh, DongHae,
siempre arruinando mis planes.
Y cómo
olvidarse de cuando te fuiste de mi lado…
Jodido Cho
KyuHyun, ¡¿para qué viniste?! ¡Quisiste arrebatarme a MI amigo, cuando YO lo
conocí primero! ¡Vete con el de cara de chica, Sungmin!
Y tú, como
un perro, te dejaste cegar por el chico malo y me dejaste, ¡puedes imaginar mi
dolor!
Como era de
esperar, viniste nuevamente a mi lado, diciendo que el chico malo de KyuHyun te
había dicho lo aburrido que eras.
¡Pero tengo
mi orgullo! Fingí estar enojado y dije que te fueras con el chico de nariz
operada, pero Dios… ¡Tu mirada! ¡Tu puchero! ¡Quién se resistiría! Maldito
chico y maldita cara bonita.
Así que
luego de que dejar que sufrieras un rato como venganza, te fui a buscar y te
“perdoné”
“¡Gracias!”-dijiste
en medio de sollozos- “’ ¡Nunca más te haré lo mismo!”
Yo me
limitaba a darte palmaditas para calmarte… Pero por favor, ¿me crees capaz de
enojarme de ser tan precioso como tú? ¿En serio?
En fin, esos
han sido uno de nuestros tantos episodios. ¡Qué divertido es conocer a Lee
DongHae!
Pero…
¿Y ahora…?
¿Dónde te
has metido? ¿Por qué hace tanto rato que no te veo?
¡Ya veo! ¡Te
has ido nuevamente con Cho Kyuhyun!
Maldito
infiel…
-Eh, Hyukie,
¡¿qué haces pegándole a mi muñeco de Nemo?!- gritaste horrorizado.
-¿Cómo?
¿Dónde estabas metido?-la confusión y la vergüenza me invadieron.
-Fui a
alquilar las películas, ¡es lo que hace media hora me pediste!
Oh… de modo
que me absorbí tanto en mis propios pensamientos que olvidé todo lo ocurrido.
-¿No te
conté? Planeo meterme a clases de boxeo, estaba practicando- qué excusa
patética. Claro que sólo tú te la creerías.
-¡Mi pobre
Nemo!-murmuró abrazando a su muñeco- ¡Ve a practicar con el chico cara de
chica!
¡Y ahora se
enojaba conmigo! ¡Y abrazaba a su muñeco! ¡¿Qué hay de mí?!
-¡Ven aquí!
Y tomé casi
con fuerza al chico, le pasé los brazos por la espalda y estreché mis labios
con los suyos.
-Para que
aprendas, pescado frito.
Hae no
podría estar más rojo en esos momentos, se quedó congelado por unos segundos,
bajó la mirada y luego, para sorpresa mía, volvió a abrazar a su muñeco.
-¿Qué
haces?- pregunté enojado.
-Si abrazo a
Nemo, me besarás, ¿verdad? –susurró el chico.
Yo me reí
cálidamente de felicidad, y lo miré con la ternura que significaba Lee DongHae
para mí.
-No hace
falta que hagas eso, pequeño tonto. Simplemente pídelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario